Diana Peña Castañeda. Colombiana y profesional en Comunicación Social y Ciencia Política. Sus textos han aparecido en publicaciones digitales como La Liebre de fuego. Me impulsa escribir historias sobre comida como un elemento simbólico quizás, ante la necesidad de darle forma a los sentimientos que a veces son recuerdos, a veces deseos, sueños, fantasías que se plasman en la silenciosa y extraña tela de la vida. Los poemas aquí reunidos forman parte de Hora muda (inédito). En esta ocasión su único interés es expresar un duelo por sí mismo, en sí mismo y nada más.
La que escribe no soy yo,
son lágrimas
que mi madre grita
frente a la tumba de papá
en espera del alba.
A Alberto
3. Réquiem
Un viento cerrado
hecho de gris y de frío
hunde sus astas
en las venas
de mi alma.
Mi llanto,
Zorzal del río
acaricia el claro
de un retrato palidecido.
Un hombre
con la cabeza abrazada
en un raudal de sueños:
El olor de las horas
en el forraje humedecido.
Es El Remolino.
Es él…
Eres tú…