Por Aldo Saúl Uribe Nuñez[1]
Introducción
Es gracias a la historia y a las ciencias humanas que hoy en día podemos pensar a la modernidad y a la posmodernidad como construcciones sociohistóricas y no como etapas que comienzan de forma brusca a partir de la nada. En ese sentido, los historiadores han referido que la modernidad inició en 1453 cuando se toma la ciudad de Constantinopla por los turcos. Otros, han dicho que inició en 1492, año en que Cristóbal Colón descubrió América y generó alteraciones en nuestro continente, Europa y el mundo.
El comercio comenzó a crecer, el poder de las naciones y sus riquezas comenzaron a prosperar y con esto se dio inicio al sistema económico-político que conocemos como capitalismo. No obstante, lo que advertimos como modernidad se estuvo gestando muchos años atrás. La modernidad comprende uno de los tres grandes periodos históricos de la vida del ser humano: edad antigua, edad media y edad moderna; ésta última como resultado de todas aquellas vicisitudes que aquejaron a las sociedades occidentales, para convertirse así en el período de mayor desarrollo científico, tecnológico y filosófico de la historia.
La modernidad como época histórica trajo consigo cambios de corte político, científicos, culturales, sociales e industriales que transformaron en su totalidad el tejido social y la forma en la que las sociedades se organizaron. En la modernidad se comenzó a tomar a la razón, a la inteligencia y a la ciencia como objetos Leer más