El tecnopoder en el ciberespacio, reflexiones para construir tecnosociedades democráticas justas

Por Mario César Campuzano Perales[*]

Introducción

Sociedad de la información, del conocimiento, sociedad red, entre otros, son algunos de los términos usados para nombrar al periodo actual, caracterizado por el uso de las tecnociencias de la información y la comunicación. En otras etapas de la historia también surgieron innovaciones tecnológicas que posibilitaron una revolución en el conocimiento y la difusión de la información, como el caso de la imprenta, no obstante, hay rasgos específicos de nuestra era que nos permiten diferenciarla de los periodos anteriores. Por ejemplo, Castells (2001) plantea que las nuevas tecnologías de la información de nuestra época tienen una relevancia muy superior porque marcan el comienzo de un nuevo paradigma tecnológico sobre la base de tres principales rasgos distintivos: 1) la capacidad de ampliar por sí mismas el procesamiento de información en cuanto a volumen, complejidad y velocidad, 2) su capacidad recombinatoria y 3) su flexibilidad distributiva. Asimismo, Castells señala que la sociedad red se trata de un cambio de paradigma respecto al anterior propiciado por la revolución industrial debido a su rendimiento superior en cuanto a la acumulación de riqueza y poder.

Las tecnociencias de la información y comunicación han posibilitado la emergencia de un nuevo espacio de interacción social denominado ciberespacio. El argumento que se defiende en este trabajo es que contrariamente a quienes piensan que internet lleva a cabo el ideal de una democracia directa y global en realidad las decisiones principales concernientes a la construcción del ciberespacio escapan por completo al control de los usuarios. Esto es así porque se han conformado estructuras de poder y relaciones de dominación. Tal es el caso de las grandes empresas capitalistas que se dedican a vigilar las actividades de las personas en el ciberespacio para comercializar sus datos y obtener otros beneficios. Esto, además de demostrar que las tecnologías no son éticamente neutras, restringe las libertades y genera algún tipo de daño que interfiere en la realización del plan de vida de las personas. Por ello, en este trabajo también se exponen algunas ideas para enfrentar esta forma de poder y construir lo que podemos llamar tecnosociedades democráticas juLeer más

¿La política es racional o pasional?

Por Mauricio Torres Peña[1]

Hace unos días escuché la anécdota de un periodista sobre la entrevista que realizó a un diputado, el cual utilizó gran parte del tiempo criticando y difamando a un partido político, durante el corte, el periodista comentó que representantes del partido reprochado se aproximaron a las oficinas de la emisora radial para recriminar la insolencia del diputado, este encuentro terminó en el intercambio de golpes y algunos improperios personales, todo por la deslegitimación verbal a un partido político.

Pero, ¿por qué un asunto de naturaleza política puede llegar a una reyerta?, ¿por qué se pelean? Para responderlo, como propuesta desde la ciencia, debemos analizar la naturaleza intrínseca del humano en cuanto a su conducta. Hay que partir de que todos disponemos de un sistema límbico en las estructuras subcorticales del cerebro, que se encarga del procesamiento anímico, una parte de ella, la amígdala, que se encarga de regular las emociones, se activa cuando percibe una amenaza en su entorno para que adoptemos un mecanismo de defensa. Para ello se comunica con el hipotálamo con el fin de inducir a otros órganos la liberación de adrenalina, norepinefrina y cortisol (hormona del estrés) para predisponer orgánicamente nuestro cuerpo a un accionar defensivo, al ataque o a la huida. Las hormonas mencionadas aumentan la frecuencia cardiaca, aumentan el azúcar en la sangre para que los músculos dispongan de ella en caso de pelear o escapar, sudamos y nos ponemos en estado de alerta.

Este espectro fisiológico es el producto de una herencia de los mamíferos inferiores que lo usan para maximizar su supervivencia cuando son amenazados. En los humanos, este mecanismo es muy útil Leer más

Las mercancías consumen mercancías

Por Osiris García Díaz[1]

Mucho se habla de la nueva normalidad sin darnos cuenta que ya estamos en ella. Después de que por un año el mundo se parara, ahora sigue su curso, pero con nuevas alternativas, como la llamada sana distancia y el uso de cubre bocas; esta situación se ha convertido en “la supervivencia del más apto”, dado que muchos llevan tiempo luchando con otras enfermedades, como cáncer, obesidad, diabetes, etc, es decir, si a todo lo demás le sumamos el COVID, tenemos complicaciones severas para las personas que porten estas enfermedades.

Así pues, con la llegada de la actual pandemia, que nos obligó al confinamiento ante los riesgos en la salud, surgieron diversas transformaciones en nuestro llamado sistema social, debido a que las plataformas digitales han llegado a llenar el vacío que tenemos por no estar en interacción física con otros individuos. En consecuencia, estas plataformas, por medio de intereses a fines, nos han reconfortado, dándonos un grupo en el que nos aceptan por los gustos que tenemos, generando así contenidos que nos ayuden a tener más seguidores o likes.

De este modo, las plataformas digitales (Facebook, Instragram, tik tok, youtube, etc) han pasado de ser un medio de entretenimiento a ser un medio comercial, ya que, por medio de algoritmos,Leer más

Ondas largas y reactivación económica en Nuestra América

Foto: Télam

Por Diego Zárate Montero[1]

Crisis sistémica

La noción de reactivación económica ha ocupado las agendas políticas en todas las repúblicas de Nuestra América debido a la profunda crisis sistémica a la que nos ha conducido la pandemia del SARS-CoV-2. Algunos países ya venían experimentando serias dificultades económicas, en términos de crecimiento económico, empleo e inflación previo a este shock, por lo que la situación general de la economía regional en Nuestra América es, por decir poco, preocupante y lamentable.

 

Las ondas largas dentro de las teorías Centro-Periferia

Si la economía mundial tuvo un desempeño poco loable en el periodo entre crisis (2008-2020), la región Latinoamericana no fue la excepción, ya que estuvo marcada por un débil crecimiento económico, un aumento del endeudamiento público y un empeoramiento en los indicadores de pobreza y pobreza extrema, particularmente, entre 2014 y 2018, como señala CEPALl (2019: 96)

La urgencia de la reactivación económica, en el contexto de una pandemia mundial, parece justificada. Sin embargo, debe ser replanteada desde consideraciones de largo plazo y matizada por una incorporación estratégicas de las teorías del desarrollo que, hasta a la fecha, han constituido un lugar común en la formulación de políticas públicas en todos los países de Nuestra América desde la segunda mitad delLeer más

Trabajadoras y trabajadores precarizados de PILARES unidos

Por Enpoli

Crónica de un proyecto fallido.

En su segundo informe de gobierno, el 5 de diciembre del 2020, hace casi un año, la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, señaló que no descansaría hasta hacer de la ciudad “una realidad” (sic), es decir, una “Ciudad Innovadora y de Derechos”, con Esperanza. Además, añadió que “iniciamos el camino de la gran transformación de nuestra ciudad de la mano de la transformación del país”. Esto significa que rompería con la continuidad que, hasta ese momento, se había estado reproduciendo, a saber, las malas prácticas públicas, la corrupción, pero también se le pondría atención a las niñas, niños, adolescentes y jóvenes, haciéndoles valer sus derechos educativos, culturales y deportivos, dotándoles de sueños, de esperanza para la transformación social.

Asimismo, entendemos que el camino de la transformación social en la ciudad se suma a la visión de la nación, como habría dicho el presidente de México López Obrador: “declaramos formalmente desde Palacio Nacional el fin de la política neoliberal, aparejada esa política con su política económica. Quedan abolidas las dos cosas: el modelo neoliberal y su política económica de pillaje, antipopular y entreguista”. Leer más

Sociología de la marginación: un marco teórico para aproximarse a su formación concreta

(…) para que pueda ser
he de ser otro,
salir de mí, buscarme entre los otros,
los otros que no son si yo no existo,
los otros que me dan plena existencia.
Fragmento, Piedra de sol. Octavio Paz (1960)

Por Julián Hernández[1]

Introducción

La discriminación[2] en México tiene múltiples nombres y rostros; desventuradamente, sigue siendo un malestar asociado no sólo a la pobreza, sino también a complejos procesos de exclusión. Las cifras, desde su pedestal elocuente, aclaran el panorama: las mujeres perciben salarios inferiores al de los hombres en magnitudes que van desde 8.4%, si observamos Quintana Roo, hasta 23%; si es el caso de Guerrero[3]; 70.4% de la población indígena carece de acceso a servicios básicos de vivienda y 41.3% a la alimentación; una quinta parte de la población mexicana considera que los extranjeros debilitan “nuestras costumbres y tradiciones”; cuatro de cada diez personas no estarían dispuestas a que en su casa viviera un homosexual o una lesbiana[4]. Diversos sectores sociales marginan movidos por prejuicios contra grupos vulnerables, ya sea por cuestiones de pertenencia étnica, color de piel, talla, modo de vestir, género, preferencia sexual, condiciones de discapacidad o edad. En el México que recorre el letárgico siglo XXI aún es común utilizar la palabra ‘indio’ para denostar a personas de piel morena o para implicar que algún sujeto posee un grado menor de valor existencial. Lo último, particularmente, es síntoma de una segregación histórica a la que han sometido a las comunidades indígenas que explica, en parte, su rezago educativo. La cristalización de este comportamiento social obliga a pensar en la necesidad de construir una nueva cultura que se asuma como descolonizante y emancipativa en aras de la integración, heterogeneidad y transigencia ante la diferencia. Desde esa lógica, el fin último de este ensayo, bajo las limitantes naturales que el espacio impone, es puntualizar algunas cuestiones teóricas para encontrar las causantes y consecuencias de la marginación, tratando de posibilitar ciertas soluciones que abonen a su absoluta erradicación.

La lógica multifactorial de la segregación

Las variables que generan el comportamiento discriminatorio poseen una fuente multifactorial, es decir, no mantienen un sólo origen. Cualquier diagnóstico basado en la linealidad que provee un único camino se encontraría con bastantes problemas materiales al contrastarse con la realidad objetiva. Siendo así, nos gustaría analizar brevemente los efectos del estigma y el prejuicio dentro de los canales cognitivos para encontrar ahí uno de los orígenes determinantes de la exclusión, anclando nuestro análisis a los estudios del Dr. Jesús Rodríguez Zepeda sobre el tema[5].

Los estigmas yLeer más

Reflexiones para repensar la escolarización

Por Rogelio Dueñas

A modo de introducción

Está claro que el conocimiento y la cultura constituyen una dupla imprescindible dentro de ese arduo proceso formativo que es la educación; en donde estriba no solo la posibilidad de transformación individual, sino también colectiva. Sin embargo, ¿dónde adquirir los conocimientos fundamentales para dicha transformación? Nuestra mentalidad escolarizada, seguro nos indicará el camino hacia la escuela, pero, ¿ésta es en verdad una fuente de conocimiento? sobre todo si lo que se busca es generar un cambio radical en la sociedad y no solo ofrecer paliativos que disfracen los males que nos aquejan. ¿Podemos autoabastecernos de los elementos culturales necesarios para analizar el panorama que nos circunda y así construir una nueva realidad? ¿A qué debemos esa especie de sacralización en torno a la escuela oficial? misma que ha propiciado que a muchos individuos les resulte inasible la adquisición de conocimientos fuera de la esfera escolar. ¿Es cierto que el conocimiento se construye entre todas y todos o requerimos de esa figura mesiánica llamada docente para encargarse de la instrucción de los “menos favorecidos”?

El presente trabajo busca generar las más diversas reflexiones en torno a la escolarización al analizar, de manera general, algunos de los elementos que componen dicho mecanismo “educativo”.

Uno

Desde principios de la pandemia, organismos internacionales como la Unicef, el Banco Mundial y la OCDE han abordado el tema del rezagoLeer más

Ecuación democrática

Por Francisco Tomás González Cabañas

El poder más la selección que se hace del mismo, menos la marginalidad que se suma a la injusticia, multiplicadas por la desigualdad dan como resultado el gobierno de los otros (otrocracia), menos la horda que se multiplica por la representación elevada a la potencia de la tutela, a la que se divide por el poder legislativo más el ejecutivo y el judicial. Expresarlo de la manera en que el resultante numérico genera la versatilidad de los algoritmos era una deuda pendiente de hace tiempo, debíamos una ecuación democrática, para luego intentar desentrañar la formulación primigenia de lo que nos hace pretendientes de lo democrático.

 Así como la ecuación de Dirac, popularizada cómo la ecuación del amor, afirma o postula: “Si dos sistemas interactúan uno con el otro durante un cierto periodo de tiempo y luego se separan, es posible describirlos como dos sistemas separados, pero de alguna manera sutil están convertidos en un solo sistema. Aunque se separen y estén a millones de kilómetros de distancia, a años luz, siguen influyéndose entre ellos. Uno sobre otro”. En esa misma línea, resultaba harto necesario traducir en la formulación por la que se expresan los números los elementos principales en los que se manifiesta lo democrático, y de qué manera introducir las modificaciones para contar con un mejor resultado, en términos democráticos, claro.

Por supuesto que la ecuación no lleva números, dado que no se trata de unaLeer más

Cuestionar las violencias de ellos, entender las narrativas de ellas

Por Itzel Campos

Hace un par de días la cantante estadounidense Taylor Swift lanzó la regrabación de su cuarto álbum de estudio cuyo título es RED, el cual había sido publicado originalmente en 2012. Este relanzamiento ha generado una ola de distintas reacciones en las redes sociales, tanto positivas como negativas, debido al contexto en el cual es publicado y el contenido de las canciones del disco. Antes de profundizar en este tema, me gustaría aclarar la intención de este texto, que no es otra sino abogar por la libertad de las mujeres. Ya sea que obtengan una remuneración económica por su arte o que traten temas que no habían tocado antes de forma tan abierta, como lo es la violencia de género ejercida sobre ellas por sus anteriores parejas sentimentales. Por último, quiero dejar en claro que el caso de Taylor Swift se toma como un ejemplo debido a su popularidad, ya que las mujeres menos privilegiadas tienen una mayor dificultad cuando se encuentran en situaciones como éstas.

            El relanzamiento de RED (Taylor’s Version) se da debido a la venta de los másters de Swift, quien publicó seis discos bajo el sello discográfico de Big Machine Records. Scott Borchetta, su director y fundador, le negó por añosLeer más

Maid y la evidencia de que el sistema es el problema

Por Eunice Sánchez

Qué difícil es identificar todo lo que engloba la violencia. La palabra en automático nos hace pensar solo en golpes, moretones, gritos y sangre. O sea, evidencia tangible y visible. Hemos crecido con la ilusión de que sólo cuando te pegan, te están violentando, pero, ¿violencia psicológica, económica? Eso no existe, nos decían.

Recientemente, en la plataforma de streaming Netflix salió una serie que —muy atinadamente— plasma todos los tipos de violencia doméstica que puede haber y de las que son víctimas las mujeres, sumado a las condiciones precarias en las que muchas veces se materna.

Maid, —Las cosas por limpiar, en español—, es una serie de 10 capítulos que nos va narrando y mostrando el proceso de afirmación de una víctima de violencia, de una joven mujer, madre de una pequeña de 3 años, que sale huyendo de la casa donde vivía con su pareja. En las primeras imágenes podemos ver que Alex (la protagonista), por la noche, toma a su pequeña en brazos, una mochila, y sale para arrancar su camioneta y huir.

Alex sale con poco dinero, casi nada de alimento, y mucho miedo. Conforme van avanzando los capítulos Leer más