Columnas de opinión
A propósito de los Premios Óscar
Por Angélica Mancilla
Este domingo se llevó a cabo la ceremonia número 91 de los Premios Óscar: para unos, un reconocimiento a lo mejor del cine; para otros, un espectáculo lleno de frivolidad.
Sin embargo, para poder hablar de los Premios Óscar tendríamos que partir de quiénes están detrás, es decir, de quiénes son los más de seis mil integrantes de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos (AMPAS) que deciden, primero, a quiénes nominan, y segundo, a quiénes otorgan los galardones. Porque puede ser una obviedad, pero si las mujeres estamos subrepresentadas en la mayoría de las industrias e instituciones, la AMPAS no podría ser la excepción, es decir, quienes deciden qué sí premiar y qué no, en su mayoría, son hombres blancos, heterosexuales y con cierto reconocimiento social; un espacio cerrado, al que sólo se puede ingresar por invitación, ya sea por haber obtenido una nominación o por recomendación. Además, resulta bastante simbólico que la estatuilla dorada tenga la silueta de un hombre, aunque no reparemos en ello.Leer más→
Una X más en el mapa de la narrativa escrita por mujeres
Por Ximena Cobos CRUZ
En cierta parte de su recorrido por el papel de la mujer en la literatura, Virginia Woolf acierta a referir la producción poética, primer bastión de las escritoras, como «literatura de la queja». Continúa avanzando, revisando, dando ejemplos del desarrollo escritural de las mujeres; hallando aciertos y desencuentros con el fondo y la forma, hasta cerrar dejándonos la tarea más ardua como creadoras: conseguir engendrar obras que ya no dependan de las condicionantes de género que la sociedad nos obliga a vivir, a veces sin reconocerlo.
Pero qué pasa si la queja se vuelve denuncia, si la palabra se convierte en un lugar tomado como sitio de batalla, de resistencia desde la crítica. Qué sucede si reconocemos en la narrativa escrita por mujeres una realidad punzante que se repite a dos casas de la nuestra o a una lengua de distancia. ¿Cambia algo realmente? O será que nos es difícil asumir hasta en la ficción que cuando la mujer alza la voz no es simplemente una queja.
Pensemos en dos escritoras: Natalia Ginzburg (Italia, 1916-1991) y Nelida Piñón (Brasil, 1934). Si revisamos sus obras, resultaría difícil sostener que en su totalidad encierran una temática concentrada en el papel de la mujer en la sociedad. No obstante, entre todo lo que ellas produjeron hay dos cuentos de los que quiero hablar aquí: “La madre” (Ginzburg) y «I love my husband» (Piñón). Estos relatos, me gusta pensar, lograron denunciar lo que las feministas han tratado en las teorías, esa bella prosa académica que nos empodera en el discurso.Leer más→
Psicoanálisis y lazo social: perspectivas sobre alteridad, subjetividad, lenguaje y violencia
Por Jimena García[1]
psic.jimena.garcia@hotmail.com
Imaginemos un momento mítico, intentando aprehender el pasado, millones de moléculas se encuentran dispersas, suspendidas en el aire, de inicio no hay contacto entre ellas; conforme el tiempo, comienza a densificar tal aire y en determinado momento se encuentran, tal encuentro produce un cambio inmediato en su conformación, se alteran entre sí, algunas se unen formando moléculas mayores, paulatinamente casi ninguna molécula conserva su forma anterior, han sido modificadas al encuentro con otro y ya poco se sabe cuál fue su forma original; desde esta ficción mítica (en tanto refiere a un origen) comprendo la alteridad, donde alter es el otro y el encuentro genera una huella ya en sí misma alterada.Leer más→