Columnas de opinión
Doce minutos por mujer
Por Andrea Pereira[1]
¿Quién lo mandó a meterse con una de nosotras?
Cuando a Renata se le ocurrió esa idea, pensé que era tonta y divertida, pero fue mucho más que eso.
El día que Juan Pescadilla llegó al pueblo, yo ya sabía, por rumores, el tipo de persona que era. Venía escapando de la justicia, y de dos ex esposas con hijos pequeños. Pescadilla era estafador, bígamo, había estado detenido dos veces por violencia doméstica, aún no tenía treinta y cinco años y ya había reconocido cinco hijos con apellidos falsos, es más, incluso hoy no sé si en realidad su verdadero nombre era Juan Pescadilla.Leer más→
El fin del Antropoceno
Una reflexión acerca del poemario Apokalipsis de Arnulfo Vigil
Por Isaac Gasca Mata[1]
La postmodernidad y su inmanente multiplicidad de discursos ha permitido que en los últimos años estilos, ideas, y corrientes de pensamiento se fusionen para sustentar expresiones que antaño parecían irreconciliables. En la literatura actual no hay periferias, no hay márgenes, centros ni perspectivas unilaterales. Al contrario, hay una representación caleidoscópica del mundo y la Historia. Al respecto, el sociólogo francés Gilles Lipovetsky considera que:
“El postmodernismo se rebela contra la unidimensionalidad del arte moderno y reclama obras fantasiosas, despreocupadas, híbridas (…) no tiene por objeto ni la destrucción de las formas modernas ni el resurgimiento del pasado sino la coexistencia pacífica de estilos, el descrispamiento de la oposición tradición-modernidad, el fin de la antinomia local-internacional” (Lipovetsky, 2003: 122)Leer más→
Cuestionamientos desde la perspectiva queer hacia el sistema de división sexual en las competencias olímpicas
Chris Mosier. Foto tomada de: smoda.elpais.com
Por Ramón Fernando Stevens Martínez[1]
Introducción
Hay normas que son violentas porque se apoyan en una concepción binaria del sexo que excluye a quienes no son capaces de adaptarse a estos rígidos parámetros. Esto es especialmente preocupante cuando se promueven desde organismos internacionales. En este sentido, una de las instituciones que más ha sufrido trasformaciones en sus nociones sobre el sexo humano y en las regulaciones que de ahí surgen, es el Comité Olímpico Internacional (COI). Dicha institución actualizó las normas que regulan la participación de los atletas transgénero, transexuales e intersexo en el 2015. Estas nuevas reglas si bien favorecieron que los juegos olímpicos se hicieran un evento mucho más incluyente, también establecieron pautas que todavía son problemáticas, ya que dejan fuera a los atletas que por diversas razones no encajan en un esquema que considera al sexo como una categoría dualista inamovible, o a los que les es imposible someterse a terapia hormonal.
El objetivo de este texto es responder a la pregunta: ¿por qué las actuales reglas de participación para atletas transexuales, transgénero e intersexuales del COI constituyen un sistema excluyente?Leer más→