Guilhem Luycx (Querétaro, 1996) Autor de “Porcelana de Menta” (2019) y Director del Proyecto de Difusión Cultural “Planta de Sandía”.
Somos resultado del cinismo
detrás del ideal
de la paternidad.
Espíritus
evocados
a las llamas
de este incendio.
Ellos, ocultos tras el porvenir aleatorio
que nos dirige,
despliegan una ausencia de cordura.
Discúlpalos,
no todos pecan conscientes.
Castígalos,
porque el error se penitencia.
Ampáranos,
la superficie se limita.
Buque Bramido
Horrorizo
en la incertidumbre del espacio
donde alguna vez fui
y dejé de ser.
La flama del reloj de arena
me ahoga en
boscaje esquelético
de manglares ermitaños.
Hundo
en la profundidad del lago
que brota del volcán
y
desplomo
en migajas
que alimentan a las aves.
Germino
entre la flora
y regreso al sol;
el espíritu del ardor
reúne mi testimonio
y eleva
ante la
decadencia espiritual.
Habito
arena
cubierta
por
agua.
¿Dónde
extiende el arcoíris
de la tierra firme
donde el gas erosiona
la existencia?
¿Cuándo
abordaré el
estambre
de exterminación
eclipsiva?
Derrito en
una cascada
de excremento,
que vomita
en dirección al
agujero negro de
la sinceridad.
Martillo
una consciencia
pesticida
contra la voluntad
del ser estable.
Humillo
en la cadena de desolación
hambrienta
de civilización
universal.
Muero
en la ciclo vía de la esperanza
del maltrato animal
y homofobia
normalizada.
Cuelgo
del por favor
y gracias,
de las disculpas
obligadas
por
parálisis
sociales.
Atropello
tras las vías
denigrantes
de la malnutrición
intelectual
y
nucleo dentro del
kamikaze
generado tras
el maullido que
devora mi apariencia
en la fogata
que alimentan
mis huesos.