Sobre la manipulación
Por Carmina Cardiel
Obediencia perfecta (2013, México) del director Luis Urquiza está basada en el cuento “El tercer grado de obediencia perfecta” de Ernesto Alcocer, ambientado en los años 70, nos cuenta la historia de uno de los más grandes pederastas que ha tenido México y el mundo: Marcial Maciel. A través del personaje ficticio del sacerdote Ángel de la Cruz, nos adentramos en un hecho crudo, cruel, despiadado y pervertido como lo es el abuso en todo sentido, llegando así a la pederastia.
Esta no es una historia al estilo del Marqués de Sade, quien por medio de sus escritos dio cuenta no sólo de las pasiones y bajezas humanas, sino de lo que acontecía al interior de un cuerpo que parecía, hasta hace a penas pocos años, intocable: La iglesia católica. Julián es un niño cuyos padres mandan a estudiar con los seminaristas para iniciar el camino del sacerdocio y lo confían y encomiendan a un mundo contrario de sus creencias religiosas y su fe.
La manipulación desde la obediencia
El director hace un gran trabajo al tocar el tema de la pederastia desde un concepto que está siempre en el centro del pensamiento político: La obediencia. Se define como obediencia a la acción de ejecutar las instrucciones que se reciben, especialmente cuando proviene de una figura de autoridad y que, desde la metafísica aristotélica, se le carga de moralidad para decir que este es uno de los rasgos que diferencia al ser humano de otros animales. Pero ¿Hasta qué punto puede obedecer un individuo sin llegar a perder su condición humana?
Ernesto Alcocer describe tres grados de obediencia imperfecta dentro de su obra, y que son el eje de la película:
- Obediencia imperfecta de primer grado: Hacer las cosas por amor a quien te lo pide
- Obediencia imperfecta de segundo grado: Amar hacer lo que se te pide
- Obediencia perfecta de tercer grado: Pensar y actuar como aquel a quien amas
En las sociedades tradicionales occidentales, el sentido de la obediencia juega un papel importante dentro de la educación de las personas, pues se le atribuye un dote de virtud y todas queremos ser personas virtuosas. Los padres y los profesores son las primeras figuras autoritarias con las que nos encontramos en la vida y de quienes aprendemos la obediencia, pero el hecho de que no enseñemos a las infancias a desobedecer las pone en un estado vulnerable con otros adultos hasta el punto de que estos últimos puedan llegar a obtener ventajas personales sobre los pequeños; es decir, la manipulación.
En este análisis se entiende como manipulación a una práctica comunicativa e interaccional, en la cual el manipulador ejerce control sobre otras personas, generalmente en contra de su voluntad o en contra de sus intereses. La manipulación involucra específicamente abuso del poder, es decir, dominación. Es el ejercicio de una forma de influencia ilegítima por medio del discurso: Los manipuladores hacen que los otros crean y hagan cosas que son favorables para el manipulador y perjudiciales para el manipulado. Esta influencia ilegítima también puede ser ejercida con cuadros, fotos, películas u otros medios. En palabras del lingüista Teun van Dijk “Muchas formas contemporáneas de manipulación comunicativa, por ejemplo, por los medios de comunicación, son multimodales, tal como es el caso, típicamente, de la propaganda” (2006).
En la cinta podemos ubicar estos rasgos con facilidad en los tres grados de obediencia, pues podemos ver cómo Ángel de la Cruz primero consigue ganarse la simpatía del joven Julián y su afecto, una manera de decirlo es que hackea sus emociones diciéndole que es el favorito e incluso se lo lleva a vivir con él. Una vez que Julián cree ser amado y ser el favorito, se convierte en una especie de esclavo para el sacerdote y parece disfrutar serlo e incluso le cambia el nombre por Sacramento. Que, si analizamos desde las creencias católicas, tiene sentido que lo haya rebautizado con ese nombre para sentirse menos culpable al tomar al joven. Y, por último, ya consumado el acto sexual que en la película de ninguna manera se hace explícito, Julián o Sacramento ya mimetizado con el pensamiento del sacerdote, enloquece cuando ve a quien considera su mecenas con otras personas, principalmente mujeres.
La misoginia de la Iglesia católica
Otro elemento no menos importante que el de la pederastia es la misoginia en el pensamiento sacerdotal que queda al descubierto cuando llegan los jóvenes a su nuevo hogar: Les cortan el cabello porque “aquí no podemos tener señoritas”, dice el padre Galaviz.
La única mujer que aparece en el rodaje es la Señora Alcérreca, quien tiene el rol de ser la benefactora del recinto religioso; es decir, es un instrumento de sustento económico y sexual cuando Ángel de la Cruz así lo requiere —Qué raro—.
Si consideramos que durante toda la película los religiosos hablan de las mujeres como seres demoniacos que sólo sirven para tentar a los hijos de dios, resulta lógico pensar que no sólo son misóginos, sino que sus preferencias sexuales son con su propio género y eso no se va a criticar aquí, pero sí el hecho de que esos jóvenes sean menores de edad y que, abusando de su posición, todo el tiempo les están manipulando para deformar su pensamiento con respecto al género femenino.
La Pederastia en México
De acuerdo con los datos de la Organización Kalli Luz Marina que acompaña a víctimas de pedofilia y otras violencias contra las infancias y las mujeres de Veracruz, México ocupa el primer lugar en el Mundo en abuso infantil y pedofilia:
- Cada día 1,000 adolescentes mexicanas se quedan embarazadas. Son más de 350,000 al año. De esos, unos 9,000 ocurren en niñas menores de 14 años.
- Las violaciones, la pobreza, la falta de educación y el acceso a los servicios de salud son las principales causas. El 90% de las violaciones contra niñas en México sucede en el entorno familiar.
- Las violaciones hacia las infancias ocurren en un 90% en el interior de los hogares por padres, tíos, primos, cuñados, abuelos, hermanos, espacios en donde las niñas deberían estar más seguras y protegidas.
- De cada 1,000 casos de abuso sexual cometidos contra menores en el país, solo 100 denuncian, de estos únicamente el 10% llega ante un juez y solo 1 alcanza una condena.
Grandes pensadores iusnaturalistas como Hobbes, Locke o Rosseau, buscaron las razones que podría tener una persona para sublevarse, pero todas sus respuestas implicaron apasionantes debates en torno a los fundamentos de autoridad, hasta que el escocés David Hume, sin bilis en las entrañas, aterrizó este hecho desde la mayor racionalidad posible y entonces apuntó: No más obediencia que la que sea útil.
Fuentes:
- “Discurso y manipulación: Discusión teórica y algunas aplicaciones” Revista Signos, vol. 39, núm. 60, 2006, pp. 49-74 Pontificia Universidad Católica de Valparaíso Valparaíso, Chile
- “David Hume: La obediencia útil”, Bermudo J.M., (1991) consultado en línea el 08 de octubre de 2024 en: https://www.jmbermudo.es/lecturas/hume-obediencia-util.html
- “México ocupa el primer lugar a nivel Mundial en pedofilia”, Kalli Luz Marina 2024. Consultad en línea el 09 de octubre de 2024 en https://kalliluzmarina.org