¿Existen los aliades? No, existen los opositores al machismo

Por Fausto Bonilla

Debemos comprender una verdad: no somos nosotros los protagonistas de esta lucha. Como varones, somos víctimas de una ceguera provocada por el orgullo. Nos creemos los libertadores, los héroes del mundo. Asumimos ser los hijos de los conspiradores y revolucionarios, y consideramos que seremos nosotros quienes liberaremos del yugo de sus opresores a los indígenas, a las mujeres y a los esclavos del capital. No, compañeros, nos estamos engañando; serán los y las indígenas quienes levanten su voz en defensa de conservar viva su cultura, será el mismo esclavo del capital quien ponga fin a su condición y serán las mujeres quienes tomen las riendas de la revolución que en ellas ha surgido. Porque también debemos comprenderlo: ésta es una revolución. Leer más

Sobre el México de hoy

Por Jesús Reyes[1]

“Ánimo mi gente, ánimo y potencia
ánimo mi barrio, ánimo delincuencia
ánimo mi sangre, ánimo y conciencia
ánimo mi banda, ánimo delincuencia”
Ánimo Delincuencia-Molotov

  En la actualidad, la gente se manifiesta para exigir sus derechos, para hacer visible su inconformidad ante un sistema que solamente nos exprime día con día, donde los ricos cada vez son más ricos y los pobres cada vez tienen menos oportunidades, un sistema donde cada día tienes que trabajar más para poder tener un plato de comida en tu mesa, donde el racismo, la xenofobia, la homofobia y la discriminación de género se viven día con día, sin tregua alguna. Ante este panorama, los derechos no se exigen con estirar la mano, ahora se ganan levantando el puño.Leer más

Vidas negras importan

Por Isabel Pacheco[1]

Respecto a los acontecimientos más actuales, estamos atravesando una situación que sólo requería de la gota final que derramó el vaso para convertirse en protesta, y no es nada nuevo, pues no estamos sino empezando a buscar la igualdad que desde hace siglos nos ha sido negada. La diferencia es que esta sociedad de “cristal”, como nos llaman por exigir nuestros derechos, no está dispuesta a callar más.

Negros y mestizos, indios y blancos, homosexuales y heterosexuales, mujeres, hombres, niños y ancianos, todos hemos atravesado la etapa del mentado e innovador bullying, porque esta palabra no es tan antigua como toda la violencia atravesada desde tiempos remotos, tiempos en los que todos han callado por un miedo impuesto, pero eso ya no pasará.

Nos dicen sociedad de “cristal” porque exigimos nuestros derechos, Leer más

Furia en las redes

(Un llamado desde Argentina) 

Por Karen Valiente[1]

“La indignación es la heroína de las redes sociales. Es más viral que los gatitos, más potente que el chocolate, más veloz que el olor a galletas, más intoxicante que el alcohol. Genera más dopamina que ninguna otra cosa porque nos convence de que somos buenas personas y, encima, de que tenemos razón. Pensamos que tenemos pensamientos éticos cuando en realidad nos invade un sentimiento moral.”
Marta Peirano.

Al leer el fragmento de Marta Peirano se me venían a la cabeza diferentes posicionamientos, entonces, decidí debatirlo en redes sociales. Ahí logramos llegar a una certeza, que ninguna indignación carece de sentido político y social. Conseguimos, además, identificar dos grandes grupos de indignaciones: las “apolíticas” y las transcendentales. 

Hablamos de “apolíticas” como idea neoliberal, que pretende individualizar a la sociedad con dispositivos de control actuales como las redes sociales, espacio donde la lucha de clases se manifiesta y es ahí donde se refleja la sociedad. Un territorio de conquista contemporáneo tan fuerte que hace un año el presidente de Brasil conquistaba su puesto con twits y buena propaganda en redes. 

Sería muy ingenuo de nuestra parte creer que cada indignación salió de la nada, que cada respuesta en una red social es individual, Leer más

Breves reflexiones en tiempos de pandemia

Por Rogelio Dueñas 

Volver a la normalidad, será nuestra derrota.

1.- A partir del 20 abril el gobierno de México, a través de la Secretaría de Educación Pública, estableció la educación básica a distancia como medida para paliar los efectos de la suspensión de clases a causa del COVID-19. Sobra decir que los planes de trabajo recomendados para llevar a cabo con niños y jóvenes durante el “aislamiento preventivo”, distan mucho de tener una calidad educativa real. Lo que me lleva a pensar que el Estado mexicano, quien hoy se pone la careta de bienhechor al pronunciar con falsa melancolía que debemos permanecer encerrados para que pronto volvamos a abrazarnos, es el mismo que durante años se ha esforzado por socavar la educación pública con sus políticas neoliberales; ya sea mediante recortes presupuestales o bien a través de la creación de programas pedagógicos que respondan a las necesidades del mercado global, Leer más

Sobre capitalismo y neoliberalismo en la Transformación de Cuarta

Por Sonia Dávila[1]

Cuando salgamos de esta crisis, el mundo será diferente. 
La psicología de los inversores cambiará, 
pero también la forma de hacer negocios o el consumo. 
Y seremos mucho más dependientes de nuestras 
familias para sentirnos seguros.

Larry Flynt[2]

Sí, los grandes capitalistas saben que después del Covid-19 el mundo será diferente y les interesa construir las condiciones para que, en ese nuevo mundo, se asuma como una responsabilidad privada la salud pública. Más aún, la utopía neoliberal según la cual, deberíamos ser más dependientes de nuestras familias que del Estado para sentirnos seguros, ha sido realizada como política pública por el Estado mexicano. Basta con recordar las declaraciones de AMLO durante la reunión que tuvo con los líderes mundiales, ante los cuales afirmó que “La familia mexicana es la principal institución de seguridad social y ahora nos están ayudando a cuidar a la población más vulnerable”[3]

Bajo esta narrativa no se asume la carga de trabajo extra que implican estas labores, ni la problemática que representa que, en un país tan machista como el nuestro, sean las mujeres quienes realizan las labores de cuidado. Leer más

De una serie no tan desenfrenada

Foto tomada del Twitter oficial de Diego Martínez Ulanosky

Por Angélica Mancilla García

Hace un par de semanas —días antes de la cuarentena por lo del coronavirus— se estrenó la serie mexicana Desenfrenadas en la plataforma de streaming Netflix. Antes y después del estreno, me encontré varias notas que destacaban el producto como una serie imperdible porque abordaba temas feministas. Por casualidad, terminé viéndola.

Desenfrenadas trata de tres mejores amigas (Carlota, Vera y Rocío), de clase alta, que, agobiadas por cumplir con los mandatos que la sociedad demanda de ellas y en un arranque de frustración, se van de viaje a Oaxaca; en el camino se encuentran con Marcela, una joven de clase baja y bailarina de un club nocturno, quien se ve obligada a escapar de un hombre viejo, que luego sabemos es el dueño del lugar en el que trabaja y al que ella y su novio-proxeneta le deben dinero. Marcela, a punta de pistola, obliga a las tres amigas a llevarla con ellas, pues necesita llegar a Oaxaca para localizar a su hermano adolescente. Durante estos días, las cuatro jóvenes se encuentran en aprietos y, entre lágrimas, peleas y abrazos, descubren el valor de su amistad y de estar juntas para enfrentar las adversidades del mundo.Leer más

Feminismo y entornos digitales.

Foto tomada de Infolítica

Por Angélica Mayoral Campillo[1]

Cuando comencé a escribir esta reflexión tenía la idea de contribuir a un pequeño cambio positivo. De pensar en el feminismo y en las posibilidades que brinda el ciberespacio para la lucha. Sin embargo, me di cuenta que poco conocía. Que hablar de feminismo y de la “Era de la información” era hablar de miles de ideas y conocimiento. Así que las siguientes palabras son una humilde invitación. La idea es mostrar que existen espacios que visibilizan y apoyan, invitar a la reflexión. Saber que la información, aprender y desaprender, está a nuestro alcance y decisión cada que iniciamos “sesión”.

Si escuchamos la palabra feminismo nos vienen inmediatamente a la mente ideas que muchas veces se relacionan con el movimiento social y algunas veces con filosofía política. Considerando ambas ideas podemos encontrar un concepto: “El feminismo es un discurso político que se basa en la justicia. El feminismo es una teoría y práctica política articulada por mujeres que tras analizar la realidad en la que viven toman consciencia de las discriminaciones que sufren por la única razón de ser mujeres y deciden organizarse para acabar con ellas, para cambiar la sociedad” (Varela, 2008; 10)Leer más

Feminismo, una apuesta transformadora

Por Angélica Mancilla

El pasado 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, la ola feminista inundó las calles del mundo. Sin duda ha sido un hecho histórico. En México, nunca antes en la conmemoración de esta fecha se había visto tal presencia de las mujeres en las calles, de todas las edades, de todas las clases, de todos los colores.

El feminismo hoy es vivencial, se manifiesta en el cuerpo. Sobra creatividad. Las mujeres más jóvenes se han lanzado a la acción directa y muchas otras, de distintas edades, siguen generando espacios de diálogo, de estudio, de escucha, de reflexión.

Así que hoy, después del #8M y del #9M, después de mostrar nuestra fuerza, nuestra rabia, nuestra indignación, nuestra organización, me es imposible no preguntarme qué sigue. Si bien estoy segura de que no vamos a parar, me parece que es importantísimo recordar y decir en voz alta que el feminismo no sólo es la exigencia de no más feminicidios e impunidad, de políticas públicas y de reconocimiento de nuestros derechos; el feminismo es anticlasista, antirracial, anticapitalista y anti todo tipo de opresión. El feminismo está cargado de potencia política que le apuesta a la transformación de la sociedad.Leer más

LA DESCOMPOSICIÓN DEL CUERPO SOCIAL

(Un grito de terror desde las entrañas de México)

Imagen tomada de vanguardia.com.mx

Por Isaac Gasca Mata[1]

  1. EL PROBLEMA

Aunque nos duela admitirlo los problemas de la sociedad mexicana son predecibles, consecuencia lógica de la conducta que la mayoría de los habitantes de este país tiene con sus semejantes. Por una parte está el caldo de cultivo de una sociedad desigual: pobreza económica, marginación, falta de oportunidades educativas y laborales, salarios insultantes, explotación laboral con jornadas de más de doce horas a cambio de ínfimos ingresos que apenas alcanzan para pagar los intereses de la deuda (pero no la deuda) que gran porcentaje de mexicanos tiene con cadenas comerciales, sin mencionar la contaminación de las urbes, el tráfico masivo y otras tantas características que como gotas de ácido corroen el equilibrio emocional de las personas. Por otra parte, la convivencia con una sociedad irresponsable, poco educada, nulamente competitiva. Basta ver los resultados que obtiene nuestro país en pruebas estandarizadas como PLANEA para sentir vergüenza[2].

A México le falta educación y por eso le falta todo, incluyendo la paz.Leer más