Por Alejandro Carrillo L.
“Sueñan las pulgas con comprarse un perro”
Eduardo Galeano
Las campañas electorales han culminado en México, el proceso electoral llamó a todo ciudadano a participar en lo que muchos de los políticos llaman “la fiesta democrática”. Los zopilotes empezaron a levantar el vuelo para bajar con ráfagas en busca de personas reducidas a números, a votos —y pido perdón por aquellos que quieran hacer el cambio y deban vestirse con plumas y picos largos para meterse en un juego en el que, si no se cuidan, la metamorfosis se hace completa—.
Este es el momento en que los problemas se visibilizan más que las soluciones, pero no los problemas de verdad, sino los problemas que cada tres años surgen de la boca de los candidatos y que además se ufanan en reiterar que son las problemáticas de la gente común que ellos buscan representar. ¿Y cuál es la solución?, no son programas de gobierno, ni mucho menos políticas publicas, que son valores inamovibles de profesionales de la administración gubernamental; en este caso, la solución es el mismo candidato, así de triste e irracional. Imaginemos que en un asentamiento urbano hace falta agua, la solución deberá ser completamente técnica, sin embargo, basta que un proselitista diga “vamos a traer el agua” y así resolver la crisis de la zona, tal cual, como si existieran varitas mágicas, así son las soluciones, se personificanLeer más